Castillo de Morón de la Frontera

El castillo de Morón de la Frontera es una antigua fortaleza ubicada en el centro de la ciudad de Morón de la Frontera, España. Está protegido por la Declaración genérica del Decreto de 1949 y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.

La escuela El Castillo es el punto de partida de un camino importante. Este camino serpentea por la ladera sur y termina en la Torre del Homenaje.

Además de este camino, hay varias otras formas de comunicación. Estas incluyen carreteras, senderos y caminos. Estos caminos permiten a los visitantes llegar a la Torre del Homenaje desde diferentes direcciones.

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El castillo tiene sus orígenes en los siglos XI y XII, con reformas importantes a principios del siglo XVI. En esa época, cuando los Téllez-Girón, condes de Ureña, se hicieron con el recinto, se llevaron a cabo cambios significativos, entre los que destaca la construcción de la torre del Homenaje. Esta monumental obra de sillares se iba a construir con un foso perimetral y tres cuerpos, pero solo se completaron el segundo y parte del foso.

El perímetro murado es una superficie ovalada de 200 metros de largo por 100 de ancho que se encuentra en un estado de ruina. La mitad norte está bien conservada y está marcada por una serie de torres. Al sur, algunos restos de cimentaciones afloran parcialmente. Los lienzos de muralla están descolgados del nivel actual del suelo y muestran una fábrica de mampuestos calizos. Las torres tienen una planta rectangular, excepto dos ubicadas en el extremo oeste y en el flanco nordeste. Están hechas de mampuesto calizo y sillar de arenisca, con algo de ladrillo en el interior y verdugadas decorativas en el exterior. Están construidas sobre un basamento escalonado que emerge desde los afloramientos rocosos, con la cámara de guardia a la altura del paseo de guardia de la muralla. La azotea almenada originalmente coronaba la cámara. La única torre en el extremo oeste tiene una puerta de recodo único de entrada desde el flanco norte, que fue recuperada en excavaciones arqueológicas recientes.

En el flanco sur del castillo hay una puerta destruida que fue reconstruida con un arco de medio punto y un torreón semicircular. La primera puerta se encuentra a nivel de cimiento y podría estar asociada a torres de flanqueo, pero no hay evidencia de ello. La Puerta Este tiene un pasillo con bóveda de cañón que comienza con un arco de medio punto con dovelas de ladrillo y jambas de piedra.

En el centro del pueblo se encuentra una colina de 300 metros de altura, en la cual se alza un castillo medieval de estilo gótico. Esta fortaleza tiene sus raíces en la época romana y presenta una arquitectura con influencias árabes de los siglos VIII al XIII. Fue de la encomienda de la Orden de Alcántara y los Duques de Osuna hicieron de él su residencia. Su ubicación estratégica le permitía controlar la campiña hasta el Alcor y la sierra sur hacia el reino de Granada. El castillo se construyó en los siglos XI y XII, con reformas importantes a principios del siglo XVI.

Durante los siglos XVI al XIX, el castillo sufrió un proceso de deterioro. Cuando las tropas napoleónicas llegaron, realizaron obras de refuerzo y readaptación, pero cuando se fueron en 1812, el castillo fue destruido, cinco torres y lienzos de muralla fueron destruidos. Después, las piedras del castillo fueron usadas para pavimentar las calles y en el siglo XX, varios lienzos de muralla y tres torres fueron demolidos.

En el siglo XIX, familias humildes comenzaron a establecerse en la ladera este. Estas familias eran conocidas como los castilleros.
En 1962, se construyó un depósito de agua en el centro del cerro. Esto permitió a las familias tener acceso a agua potable.

En 1973, el ayuntamiento recibió la fortaleza. Desde entonces, han surgido varios proyectos municipales para mejorar la arquitectura y realizar investigaciones arqueológicas. Estos proyectos han sido una prioridad desde 1989.

Esperamos que hayas disfrutado del viaje virtual a través del Castillo de Morón de la Frontera. Si has aprendido algo nuevo y te ha gustado la experiencia, compártela con amigos y familiares. Nunca dejes de buscar nuevas historias para descubrir, ¡hasta la próxima!