El Castillo de Barcience se encuentra en la localidad de Barcience, en la provincia de Toledo, España. Esta maravillosa construcción se encuentra en la región de Castilla-La Mancha.
El castillo de Barcience se encuentra en la provincia de Toledo. Se eleva majestuosamente sobre un cerro, desde el que domina la localidad.
Para llegar al castillo, hay una pista de tierra junto al cementerio. Esta pista discurre por un pequeño pinar. ¡Es un lugar muy bonito para visitar!
Barcience fue una zona fortificada desde los siglos XI y XII. En el siglo XIII, fue cedida por el Gran Maestre Enrique IV de Castilla al Adelantado Alfonso Tenorio, quien era parte de la familia Silva, Condes de Cifuentes desde 1454. Esta familia construyó el castillo en el siglo XV, comenzado por Juan de Silva y concluido por su nieto Juan de Silva y Castañeda. En el siglo XVI, el castillo fue equipado con artillería y una guarnición.
La familia de los Silva pasó a ser dueña de los castillos del Infantado, Osuna y Pastrana. El duque de Pastrana donó el castillo de Barcience al Papa León XIII, quien lo vendió a un particular llamado Cirilo Calderon. Cirilo era un hombre de negocios muy astuto, y adquirió el palacio de Barcience de la familia Taramona. Con su habilidad para los negocios, logró convertir la finca de Barcience en un gran emporio agropecuario. Actualmente, toda esta grandeza está en manos de Luis Calderon, el heredero de Cirilo.
Este castillo no ha sido testigo de ninguna guerra, por lo que ha sido usado como residencia de la nobleza a lo largo de los años.
El castillo de Barcience es casi cuadrado. Tiene una impresionante torre cuadrada. En el muro exterior hay un gran león rampante, que es el símbolo de la familia Silva, los condes de Cifuentes.
En la parte trasera hay dos torres cilíndricas en los ángulos. En la parte delantera hay una torre de homenaje a un lado y una torre rectangular más grande al otro.
El castillo está en ruinas. Parece que había dos pisos y los adarves que conectaban las torres. Estos adarves seguramente eran usados para pasar de una torre a otra. Las murallas del castillo también están destruidas. Esto nos muestra que el castillo ha visto tiempos mejores.
Debió haber un foso y una barrera para proteger el recinto. Ahora solo quedan dos cubos que protegen la puerta de entrada. Esto nos muestra que el recinto fue diseñado para ser seguro.
Estamos seguros de que disfrutará de la historia que el Castillo de Barcience tiene para ofrecer. Recomendamos encarecidamente visitar este lugar para descubrir su fascinante pasado. Que tengas una estancia maravillosa. Adiós.