Castillo de San Felipe, Mahón

El Castillo de San Felipe de Menorca es una antigua fortaleza española del siglo XVI ubicada en la orilla sur de la boca del puerto de Mahón, en el municipio de Villacarlos. Esta fue una de las primeras fortificaciones de estilo abaluartado construidas en España.

En marzo de 1551, se decidió que Menorca necesitaba mejorar sus defensas. Para esto, el conde Hugo de Cessane, un ingeniero italiano, fue encargado de diseñar un castillo para defender la villa y el puerto de Mahón.

En 1552, se inició la construcción del castillo, pero tras el fallecimiento de Cessane en 1553, se perdieron las trazas de la fortificación.

Por lo tanto, en 1554 se designó a Juan Bautista Calvi como nuevo ingeniero. Él realizó una nueva traza y cambió el emplazamiento al actual. Finalmente, en 1556 se mandó poner la Bandera como signo de que ya se consideraba un puesto militar en condiciones de defensa.

Visita Castillo de San Felipe

En 1708, los ingleses conquistaron Menorca, pero no fue hasta 1714 que la isla quedó bajo su control. Refueron el castillo de San Felipe, confiando en la superioridad de su flota. Sin embargo, cuando la defensa naval falló, Menorca no pudo resistir el ataque, ya que la guarnición inglesa solo contaba con entre 2000 y 3000 hombres, mientras que la guarnición de la isla necesitaba entre 6000 y 10 000. En mayo de 1756, los franceses, liderados por el mariscal duque de Richelieu, ganaron la batalla naval de Menorca y, al final de junio, asaltaron el castillo, conquistando así Menorca para Francia.

En 1763, el Tratado de París puso fin a la guerra de los Siete Años entre Francia e Inglaterra, y Menorca fue devuelta a los británicos. Sin embargo, en 1779, Inglaterra y España entraron en guerra. Los españoles atacaron Menorca y conquistaron el castillo, demoliéndolo salvo por las torres y baterías necesarias para defenderse. En 1798, los ingleses recuperaron Menorca y reconstruyeron el castillo de San Felipe, pero en 1802, tras la firma de la paz de Amiens, Menorca volvió a España y los ingleses abandonaron la isla dejando el castillo a medio reconstruir. Carlos IV ordenó su demolición en 1805, dejando únicamente las baterías necesarias para la defensa del puerto.

El castillo fue construido para defenderse de los ataques de la escuadra turca en el Mediterráneo Occidental, que atacó Menorca dos veces en un lapso de veinte años. La ubicación del castillo ayudó a las comunicaciones españolas con Italia durante los siglos XVI y XVII, y más tarde, durante la ocupación británica de Menorca, sirvió como un arsenal naval para apoyar a la otra colonia británica en territorio español: Gibraltar.

Desde 1998, el Consorcio del Museo Militar de Menorca y Patrimonio Histórico-Militar del puerto de Mahón y Cala San Esteban se ha encargado de gestionar las ruinas del castillo de San Felipe, así como el resto de fortificaciones del puerto de Mahón (el fuerte de San Felipet, la fortaleza de Isabel II en La Mola, el cuartel de Cala-Corp y la Torre d’en penjat). Gracias a este acuerdo, se han podido recuperar parcialmente las galerías subterráneas del castillo y comenzar su musealización. Recientemente, parte de estas instalaciones se han abierto al público.

¡Explora el Castillo de San Felipe y disfruta de la maravillosa experiencia que te ofrece! Desde sus relieves impresionantes hasta sus maravillas arquitectónicas, este destino ha sido fuente de inspiración y único en todos los sentidos. ¡Vive esta aventura única! ¡Adiós!